Los frigoríficos industriales son sistemas complejos que trabajan a muy bajas temperaturas. Además, sus operarios suelen permanecer bastante tiempo en su interior. Por estas razones, es muy conveniente que los profesionales que suelan trabajar con frigoríficos industriales conozcan bien todas las medidas de precaución que se deben adoptar para que este tipo de tareas no perjudique su salud.
El principal uso de este tipo de refrigeradores industriales es la conservación de alimentos o de otros productos que requieran frío para ello, especialmente en el sector de la restauración.
Trabajar en estas instalaciones conlleva sus riesgos de accidentes y también puede causar enfermedades, si no se adoptan las medidas preventivas adecuadas. Los riesgos más habituales, entre otros, se originan en los momentos de carga y descarga, cuando se procede a la retirada de los alimentos, cuando hay procesos de triturado o transformación, cuando se procede a la extracción del gas del circuito o el aceite del compresor y, finalmente, cuando se dan fugas de amoniaco, que es el gas refrigerante por excelencia en el sector de la alimentación. Se usa especialmente en el enfriamiento de carnes y pescados, frutas y otros vegetales, leche y queso, bebidas y helados.
A pesar de ser un refrigerante muy seguro, si cuenta con las instalaciones adecuadas, y de ser ecológico y eficiente en términos económicos, también presenta sus riesgos, ya que en caso de fuga las personas pueden sentir molestias e intoxicaciones que pueden llegar a ser graves.
También las bajas temperaturas son causa de problemas para la salud, dado que pueden deteriorar el funcionamiento corporal y afectar a las manos, los ojos o los oídos. Se puede llegar incluso a la hipotermia.
Cualquier empresa de catering y cocina industrial en Barcelona es responsable de que sus empleados dispongan de la equipación adecuada y de un tiempo límite de presencia en estas instalaciones. La primera medida de prevención por parte de la empresa es dar la formación adecuada a sus empleados sobre las medidas a tomar y los procedimientos de trabajo.
Los elementos esenciales a tener en cuenta en un correcto protocolo de prevención podríamos resumirlos de esta forma:
– Es necesario que el personal utilice los guantes y las gafas de protección homologados.
– El calzado debe ser especial antideslizante y la equipación de trabajo debe cubrir totalmente al trabajador.
– El operario debe recibir consejos de alimentación adecuados a su exposición al frío (alimentos calóricos).
– Deben estar disponibles los equipos de extinción de incendios y la zona debe estar correctamente señalada con carteles de precaución.
– Se debe entrenar al personal para que sus movimientos sean adecuados, sin brusquedad y con las precauciones debidas.
Además, se debe disponer de las fichas de seguridad de los gases refrigerantes de la instalación y, desde el punto de vista técnico, se deben realizar evaluaciones sobre los riesgos de explosión, se deben calibrar periódicamente los sensores del oxígeno y del gas butano y mantener una limpieza adecuada.
Con todas estas medidas de prevención y con los sistemas más actuales, trabajar con frigoríficos industriales será mucho más seguro. Consulta nuestro catálogo para más información.